No hay que confundir Power Wagon con Power Wheels, los Power Wheels son carros eléctricos para niños, la Power Wagon es toda una leyenda entre las camionetas del Carnero, sus inicios se remontan a 1945, y aunque siempre se distinguió de entre toda la manada de RAMs, es como modelo 2017 cuando RAM decide darle una nueva personalidad, aunque no muy original.

Verán, las Power Wagon han sido camionetas todoterreno desde antes que la Ford Raptor las hiciera populares, la diferencia es que la Power Wagon es de uso rudo.

Sin embargo, de la Raptor, RAM aprendió una lección: si quiere vender sus camionetas más rudas, deben verse rudas. Y así es como la Power Wagon 2017 se convirtió practicamente en una Rebel 2500.

Casi todo lo que que caracteriza a la Rebel 1500 lo encontramos en la Power Wagon: parrilla con ese adorno que nos recuerda los bigotes de Yosemite Sam, enormes letras en el portón trasero que incluso los miopes podemos leer con claridad y una notable ausencia casi total de cromo. El interior también puede llevar las originales vestiduras que simulan huellas de llanta.

El motor que llevará es el 6.4L Hemi V8 con 410 HP acoplado a una caja automática de 6 marchas. Rendimiento oficial no es difundido ya que no lo requiere la EPA al ser un vehículo de uso rudo.

El equipamiento de serie incluye un cabestrante con capacidad de 12,000 libras empotrado en la defensa delantera, rines de 17 pulgadas enrrollados en llantas de 33, amortiguadores Bilstein y placas protectoras en el tanque y caja.

Recien presentada mundialmente en el autoshow de Chicago, se espera su llegada a los concesionarios durante el otoño. Los precios se anunciarán antes de su lanzamiento. Es bueno aclarar que si todos los elementos visuales no son del completo agrado del comprador, este puede optar por tener una Power Wagon Tradesman que devuelve el aspecto normal de una RAM 2500.

Así como la Power Wagon es un Rebel 2500, ya veremos si ahora Ford se anima a sacar una F-250 «Raptorizada», sin duda la competencia se pondría muy interesante.