Godzilla es eterno, o al menos eso quiere Nissan, y es que el conocido como R35 ha estado entre nosotros desde el lejano 2009. Leyeron bien, el actual GT-R tiene ya 15 años y aunque los Japoneses han querido mantenerlo al día, la verdad es que ya parece más bien un chavorruco negandose a aceptar su edad.

Para el 2024 Nissan nuevamente lo renueva, recordemos que la primera vez que lo hizo fue en el 2017 aunque esta vez es más notorio:

Para empezar, la parte trasera recibe nuevo  difusor y en la variante Nismo un nuevo alerón tipo ¨cuello de ganso¨.

Los rines en terminado dorado indican que nuestro invitado es un ¨T-Spec¨.

El frente es el más cambiado y recibe parrilla mucho más angosta ya que Nissan la ha separado de la parte baja y eso crea una fascia  mucho más elaborada que antes. Llaman la atención las luces de niebla en forma de cubos de hielo.

Otros cambios para el 2024 son el retorno de la mencionada variante llamada ¨T-Spec¨ y con ello el regreso del color Morado Medianoche y Verde Jade Milenio. El color Gris Sigiloso en la versión Nismo. Este último también recibe paquete de apariencia con elementos en fibra de carbono.

El interior se mantiene sin cambios y siendo honestos se ve anticuado y casi obsoleto, y eso que se medio actualizó en el 2017. La pantalla es de apenas 8 pulgadas aunque para compensar el sistema de audio lleva 11 bocinas de serie.

Así mismo, mecanicamente se mantiene intacto y eso no es tan malo, pues aún es competente aunque ya no sorprendente como lo fue:

• 3.8L V6 biturbo con 565 HP en el GT-R normal
• 3.8L V6 biturbo con 600 HP en el Nismo.

En ambos casos la transmisión es una automática con 6 velocidad y los 2 son AWD.

No se han mencionado precios ni todos los colores disponibles más que el nuevo y los que regresan, pero se sabe que Nissan empezará a importarlos de su natal Japón durante esta primavera y la variante Nismo durante el verano. Como referencia el modelo 2023 tiene un rango de precios de entre $116,040 y $215,740 dólares. Un precio elevado para un quinceañero, ¿No creen?