Se veía venir, era cuestión de tiempo para que Cadillac le encargará a su división ¨V¨ que modificará a su SUV super ventas, la Escalade.

El resultado, estéticamente es muy reservado, pero en cuestión de desempeǹo y prestaciones es muy competitiva en un segmento donde practicamente es la única en su especie.

¨V¨ agarra una Escalade y le modifica la suspensión y el sistema de frenos y le da unos Brembo, llantas y rines de 22 pulgadas son exclusivos de la variante,

Entre los cambios cosméticos tenemos defensas apenas distintas en la parte trasera para acomodar las salidas de escape dobles en ambos extremos, el frente lleva una fascia ligeramente modificada para verse más deportiva. Obviamente no pueden faltar los emblemas ¨V¨ en los costados y el portón trasero.

El interior es practicamente el mismo que una Escalade de alta gama con la mayoría de equipo de serie como por ejemplo el par de pantallas OLED para el panel de instrumentos y sistema de infotenimiento que cubren un total de 38 pulgadas. las vestiduras de las 3 filas son de piel al igual que el tablero, la consola y los paneles de las puertas. El sistema de audio tiene 36 bocinas comparado con las 19 que tienen otras versiones.

Y por supuesto, lo que hace ¨V¨ a un ¨V¨ es el motor modificado, en este caso el 6.2L V8 supercargado con una potencia de 682 HP que eclipsan completamente a los 420 caballos que llevan las otras variantes. La transmisión sigue siendo la automática de 10 velocidades. Es AWD. No esperen un rendimiento espectacular, es de solo 11 MPG en ciudad y 16 en carretera.

Mientras la Escalade está disponible en 9 colores, la ¨V¨ solo lo está en 5:

1. Negro Cuervo
2. Blanco Cristal
3. Gris Argén
4. Rojo Radiante
5. Verde Esmeralda

Cadillac pide $149,695 dólares por la Escalade V, para comparar, la Escalade de entrada llamada Luxury tiene un precio de entrada de $79,795 USD. Vale la pena pagar casi $70,000 dólares por la ¨V¨ que siendo sinceros se ve casi igual? Claro que si, la Escalade V es una bella durmiente que despierta con un pisotón al acelerador y entonces se convierte en una fiera rugiente. Claro que vale la pena y valió la pena la espera. Gracias a Cadillac Cable Dahmer en Topeka, Kansas, por las facilidades otorgadas.