Cadillac entra al mercado de los vehículos eléctricos en el segmento con mayor apogeo del momento: los crossover. Afortunadamente su ejemplar a electrones tiene un nombre propio y no uno con un par de letras y un número.

Y para bien o para mal estrena el nuevo lenguaje de diseño de la marca que podemos describirlo como elaborado. Puede gustar o no, pero no pasa desapercibido.

Y es que mientras el frente se ve moderno y hasta cierto punto como un Cadillac del futuro, la parte trasera es un tanto confusa con elementos que salen sobrando o pretenden ser lo que no son, dejen les explico: las luces traseras superiores que nacen en el pilar «D» y que terminan en el portón son más adorno que nada en los costados pero al menos son originales  y las luces de freno son las de abajo que parecen reflectores.

Al frente la «parrilla» es enorme e iluminada, y por supuesto que la iluminación es animada.

Si bien la cabina no es ultra moderna como en otros vehículos, si se ve elegante y premium. Aquí la novedad es la pantalla curveada de 33 pulgadas que contiene todas las funciones: panel de intrumentos y sistema de infotenimiento. Y ojo que digo pantalla en singular y no pantallas en plural, y es que en la Cadillac contrario a otros vehículos es realmente una sola pantalla y no 2 bajo el mismo cristal.

Utiliza la plataforma Ultium que también usan las Chevrolet Blazer, Equinox y Silverado EV pero no se preocupen que la Cadillac tiene sus componentes y elementos propios.

De momento la Lyriq lleva un motor eléctrico en el eje trasero con 340 HP, el rango estimado es de 312 millas. Posteriormente se ofrecerá una con doble motor y AWD con hasta 500 HP pero un menor rango. Cadillac dice que en un cargador rápido DC puede recargar 76 millas en 10 minutos.

Sabemos que tiene un precio inicial de $62,990 dólares en Estados Unidos. Solo se ofrece en 4 colores:

1. Negro Estelar
2. Blanco Cristal
3. Gris Satinado
4. Azul Opulento.