Después de haber manejado el Camaro SS 2019 es difícil superar la experiencia de manejar al «pony car» de Chevrolet. Se pudiera llegar a pensar que el Camaro LT con su motor de 4 cilindros va a dejar mucho que desear.

Y sin embargo, no decepciona del todo. Sí, se extraña el rugído del V8, pero al menos el 4 cilindros no suena como minivan, cosa que pasa por ejemplo con los Charger Hemi y los V6. Y no es para menos, el Camaro tiene 275 HP, una cantidad nada despeciable.

Fuera del ladrido ausente, lo demás que hace un Camaro a un Camaro 2019, está presente: la imagen criticada, la mala visibilidad al frente, los asiemtps traseros inútiles y la cajuela diminuta.

Pero no todo es malo, el interior sigue siendo relativamente cómodo para los pasajeros que van al frente, el Sistema de infotenimiento es de los mejores que he utilizado a pesar de la rara posición de la pantalla, la unidad manejada llevaba el sistema «heads up display» que aunque opcional, no se ofrece en sus competidores. La cámara de reversa califica de buena y la alfombra es fácil de limpiar.

La unidad manejada, siendo la 2LT llevaba asientos delanteros forrados en piel con calefacción y ventilación, llevaba además la transmisión de 8 velocidades con paletas de cambio al volante. Cabe señalar que la transmisión de 6 marchas es la de serie, la de 8 es la opcional en esta variante.

Con un precio inicial (la versión 2LT) de apenas $28,495 dólares es una opción más que interesante para quienes buscan un coupé de apariencia deportiva y controversial.