A partir de Celaya, Guanajuato, y por los próximos 1,600 kms. no viajaré solo: Jonathan Chabre hizo el favor de acompañarme desde la tierra de la cajeta a Guadalajara y de allí hasta San Antonio, Texas.

Un momento, ¿Guadalajara? Si, aproveché que estaba relativamente cerca de la casa materna para ir de visita de doctor express super relámpago que duró de las 6 de la tarde del Domingo a las 9 de la mañana de Lunes. 15 horas en la Perla Tapatía, nuevo récord de estancia de corta duración. Disculparán las fotos, pero tengo a Chabre de testigo que deseaba encontrarme con un limpia-vidrios en alguna esquina y raramente eso nunca sucedió.

Durante mi corta estadía en Guadalajara visitamos Star Patria.

Aquí admiré a otro Prieto de ensueño mientras ellos admiraban al verdadero Prieto.

Después visité familia y miembros del Club smart GDL se dieron cita para ver en el que en ese momento era el único Fortwo 453 circulando en el país.

Aqui agradezco a mi mamá Rosa María Rada por recibir a un par de peregrinos en su casa y a Eduardo Ojeda y María Esther Galván por habernos abierto las puertas de su casa y su cochera con todo e invitados, permitiendo incluso tener una sesión fotográfica aún en medio de la pena que los atormentaba en esos momentos.

De regreso a casa de mi mamá, ella y mi abuelita se llevaron al Prieto y quedaron encantadas. Sigo convenciendola que su próxima compra automotriz sea un smart.

Llegando a casa nos fuimos a dormir, al día siguiente reiniciaba la aventura. Esta historia continuará…