Se ve como una Range Rover normal, parece una Range Rover común y corriente, y sin embargo, cuesta casi 3 veces comparándola con la Range Rover de entrada.

Por nuestra invitada piden $294,300 dólares, pero, ¿los vale? Conozcámosla y ustedes deciden.

El programa de personalización de Land Rover llamado SV se encarga de ponerle lo mejor a la P615. Exteriormente hay opciones exclusivos para el color de la carrocería como el que porta que es negro Obsidiana satinado. Fuera de eso solo un muy discreto emblema de SV reside en el portón trasero.

Se ofrece en carrocería normal y alargada, lo ganado en longitud exterior se traduce en mayor espacio interior para las plazas traseras. Los rines son de 23 pulgadas.

Los mayores cambios y mejoras están en la cabina donde para empezar, tiene capacidad solo para 4 afortunados y acaudalados pasajeros. Los delanteros gozan de asientos calefactables, enfriables y con masaje. El sistema de audio Meridian tiene 35 bocinas.

Mientras que las plazas traseras tienen pantallas de 11.4 pulgadas para entretener a lo ocupantes así como la continuación de la consola central donde allí se esconden mesitas de servicio. Por último, tiene un refrigerador y copas para el chupe.

El motor encargado de mover a la Range Rover tope de gama es el 4.4L V8 turbo con 606 HP o 615 PS, de allí el nombre de P615. La transmisión es la automática de 8 velocidades. La aceleración de 0 a 60 MPH se da en 4.3 segundos, la velocidad máxima es de 162 MPH, es decir, 260 kms/hr.

Por precio y/o prestaciones, Land Rover pretende que la Range Rover P615 compita contra otros SUVs de super lujo como por ejemplo la Mercedes-Maybach GLS y la Bentley Bentayga.

Y si bien en teoría tiene todos los elementos para hacerlo, muchos se sorprenden con el precio ya que aunque sea muy especial, para su desgracia, no lo aparenta. Gracias a Land Rover Onyx en Omaha, Nebraska y a Younes Bouhoum por las facilidades otorgadas.