Cuando se tiene dinero de sobra y se quiere tener el vehículo de moda, es decir, una SUV, las opciones son contadas, pero si se quiere tener lo mejor de lo mejor, entonces las opciones se reducen a un solo vehículo, la Rolls Royce Cullinan.

Por increíble que parezca, ya ha estado entre nosotros desde el 2019, por lo que una renovada ya era justa y necesaria.

Y es así como llegamos a la Cullinan Serie II que es como Rolls Royce llama a la camioneta actualizada, no es que sea nueva generación ni mucho menos, pero aparentemente utilizar número Romanos la hace ver como de la realeza.

Los cambios si bien son mínimos y exteriormente se concentran al frente, no pasan desapercibidos.

Puede gustar o no, pero ciertamente se ve diferente, sobretodo porque le han puesto una sonrisa hasta cierto punto forzada, Rolls Royce le ha quitado la seriedad. Por alguna manera me recuerda a la fascia de la BMW iX. Estrena también luces LED diurnas en forma de ¨L¨ al revés. Otro elemento que recibe iluminación es la parrilla.

El perfil nos muestra rines de nuevo diseño de 23 pulgadas hechos de una sola pieza de aluminio.

La parte trasera también ha sido actualizada levemente mediante la incorporación de un acabado negro brillante junto con elementos de acero inoxidable pulido.

La cabina se ve modernizada con la incorporación de un solo panel que aloja al cluster de instrumentos y el sistema de infotenimiento. Estrena nueva opción para las vestiduras hecha con bambú. Por supuesto que el resto de materiales siguen siendo de la máxima calidad y consisten en pieles finas, tapetes de lana y molduras de madera y aluminio. Y claro, no puede faltar el cielo estrellado.

Mecanicamente no hay cambios y el motor que mueve a la Cullinan 2025 es el 6.7L V12 con 563 HP o 592 HP en la variante llamada ¨Black Badge¨. La transmisión es una automática de 8 velocidades. Y aunque el rendimiento no importa en lo absoluto a sus acaudalados propietarios se los comparto: 12/20 MPG.

Preguntar por el precio de un Rolls Royce muestra insolvencia financiera y sería un insulto, pero dicen las malas lenguas que el rango de precios de entrada de la Cullinan 2025 ronda por encima de los $410,000 dólares y la mencionada Black Badge sobrepasa los $475,000 USD y eso es antes de opciones e infinidad de personalizaciones disponibles.

Hablando de eso, para que se den una idea, los colores a escoger son 68 colores por lo que obviamente no les pondré toda la lista, solo basta decir que la pintura que lleva nuestra invitada es nueva y responde al nombre de ¨Trufa Emperador¨.

Siendo un SUV de super lujo, la Rolls Royce tiene de rival más directo a la Bentley Bentayga y por prestaciones compite contra la Mercedes-Maybach GLS, Aston Martin DBX 707, Lamborghini Urus y por precio también a la Ferrari Purosangue.

Recordemos como es la Cullinan antes de su renovada de medio ciclo, la que se vendió del 2019 al 2024:

La Rolls Royce Cullinan espantó a los puristas cuando debutó pero pronto se convirtió en su modelo más vendido, ahora hay que acostumbrarnos a su sonrisa prepotente porque sabe que es la SUV más imponente, lujosa y por supuesto cara. Gracias a Rolls Royce Avondale en Dallas, Texas y a Nolan Bedford por las facilidades otorgadas.