Aparentemente a Lamborghini no le gusta mucho el nombre de su fundador: Ferruccio, y tal vez por eso es que para celebrar los 100 años de su nacimiento, en lugar de llamar al que fue su auto insignia en el ya lejano 2017 Lamborghini Ferruccio, lo nombró Centenario.

Basado en el ya descontinuado Aventador, el Centenario tiene su personalidad muy propia, muy Lamborghini. Se distingue inmediatamente como tal y siendo una edición limitada, no puede faltar su dosis de diseño extremo.

Eso explica la ausencia de defensa trasera que ha sido sustituída por el que deber ser el mayor difusor en la historia de los difusores traseros, me recuerda a ese meme de las defensas BMW que predice que para el 2050 el frente será pura defensa. En fin, mal chiste. Volviendo al Centenario, justo en medio de las 6 aletas viven 3 salidas de escape. Finalmente, calaveras con iluminación en forma de ¨Y¨ residen bajo el alerón extendible.

El perfil es casi igual de dramático empezando con los faldones laterales que se elevan casi en paralelo con parte de la carrocería que junto a orificios, aletas y hendiduras crean esa imagen audaz. Las ruedas delanteras son de 20 pulgadas y las traseras son de 21, en ambos casos los rines tienen perforaciones para facilitar el enfriamiento de los frenos. El Centenario tiene dirección en las 4 ruedas a bajas velocidades.

El frente es el más normal por así llamarlo ya que mientras los faros son los que delatan la edad del auto, la cantidad de entradas de aire hacen que el auto se vea más agresivo.

La cabina está adornada con fibra de carbono, piel y gamuza. Obviamente está mejor equipado con respecto al Aventador con el sistema de infotenimiento actualizado y con pantalla de 10,1 pulgadas. El resto sigue esa temática de avión de combate que predomina en los toros italianos.

Ahora, todos sabemos que lo más importante en los Lamborghini es el motor. El encargado de moverlo es el 6.5L V12 con 759 HP. Los números que importan: la aceleración 0 a 62 MPH: 2.8 segundos. Velocidad tope: 217 MPH, es decir, 350 kms/hr.

Lamborghini solo hizo 40 Centenarios, 20 coupés y 20 roadsters como nuestro invitado, en su momento pedían $1.9 millones de dólares, hoy en día cuando alguno aparece en venta el precio sobrepasa los $3.5 millones.

Sin duda alguna, Lamborghini sabe como inmortalizar el que hubiera sido el cumpleaños número 100 de Ferruccio, menos mal que decidió llamarlo Centenario. Gracias a Holman Motorcars en Chesterfield, Missouri y a David Humphrey por las facilidades otorgadas.