Primero despidieron a los conductores y ahora al vehículo. Me refiero a los hámster que le dieron vida al Soul. El último de los pseudo-crossover cuadrados. El sobreviviente de los 3 raros ha sucumbido a las garras de los crossovers sin identidad.

Porque hay que reconocer que el Soul tiene su identidad muy propia, fue de los primeros Kia en mostrarle al mundo que los Coreanos podían hacer autos interesantes.
Vivió por 3 generaciones y 16 años y a lo largo de ese tiempo fuimos testigos de la evolución del hatchback. Nunca abandonó su estilo, se mantuvo fiel a su imagen y la gente respondió.

Calaveras verticales y faros horizontales siempre estuvieron presentes lo mismo que sus dimensiones que apenas crecieron y no lo hicieron exageradamente como otros autos que crecen descomunalmente con cada iteración.

La cabina también fue mejorando con cada generación y fue evolucionando a lo largo del tiempo pero siempre mantuvo una estética simple pero funcional aunque eso sí, con detalles interesantes. Su talón de Aquiles era la alfombra que es malísima, un simple forro peludo que no quiere soltar lo que atrapa.

En su última generación era movido por el motor 2.0L de 4 cilindros con 147 HP unido a una caja tipo CVT, solo era FWD. Si bien no levantaba suspiros, era lo suficiente para ser un medio de transporte decente.

Este 2025 era el escalón de entrada a la gama Kia al ser el más barato de los Coreanos, se ofrece todavía en 4 versiones con un rango de precios de entre $20,490 y $24,790 dólares. Venía hasta en 7 colores con la opción de techo negro en la gama alta.

Su mejor año se dió en el 2015 cuando mundialmente vendió más de 200,000 unidades, de las cuales más de 145,000 fueron adoptadas en Estados Unidos. Pero desde entonces sus ventas se vinieron en picada, ni siquiera llegando a las 55,000 unidades alrededor del mundo, con poco más de 52,000 de ellas destinadas a la Unión Americana.
A pesar de seguir teniendo ventas aceptables, otros factores que influyeron en su descontinuación es el hecho de que en la gama Kia hay otros vehículos de dimensiones similares aunque de apariencia más convencional: el Niro y el Seltos. Por si fuera poco, me atrevería a decir que ¨la gota que derramó el vaso¨ es la inminente llegada del K4 hatchback, un vehículo con estética mucho más moderna que Kia espera sea un éxito.
A fin de cuentas el Soul fue el último de los cuadrados, su producción en su natal Corea del Sur ha sido anunciada para finales de este mes, en total se vendieron más de 1.5 millones de Souls. Fue un placer haberlo manejado en bastantes ocasiones y claro que se le echará de menos.
