Solo 40 Bolides hay en el mundo, y nos tocó ver uno. Será casi imposible verlo en las calles ya que es un auto exclusivo para circuitos, aunque seguramente algún billetudo lo sacará a las calles aprovechando la nula aplicación de las leyes en algunos países.
Siendo un auto para circuito, el chasis es ligero construído en fibra de carbono, todos los elementos de diseño fueron hechos para lograr una aerodinámica extrema al producir una carga aerodinámica significativa para tener rendimiento muy dinámico.
El Bolide está basado en el Chiron, pero por obvias razones el mencionado chasis está reforzado pero al mismo tiempo es más ligero que el del auto donante. El monocasco es más pequeño para reducir el peso.

Como vemos lleva un diseño mucho más elaborado y complicado en los extremos, empezando por los faros en forma de ¨X¨. Por supuesto que no puede faltar la parrilla en forma de herradura.

La parte trasera tiene un enorme alerón para ayudar a la carga aerodinámica, Las luces traseras tienen forma de ¨X¨ también.

La temática de la ¨X¨ se repite en la cabina empezando por el volante que realmente no es volante pero que no deja de ser ergonómico. Los asientos tienen más soporte, el panel de instrumentos son 3 pantallas curvas frente al conductor, pero lo que más apantalla son esas especies de salidas de escape que son precisamente las salidas de aire.

Y llegamos a lo que hace un Bugatti al Bolide: su motor que es el 8.0L con 3 turbos W16 con nada menos que 1,825 HP cuando se utiliza gasolina de 110 octanos o solamente 1,578 si se llena con combustible de 98 octanos. La transmisión es la doble embrague de 7 velocidades. Es AWD. La aceleración de 0 a 60 MPH se da en 2.2 segundos y la velocidad tope está limitada a 236 MPH, es decir, 380 kms/hr.

Como suponemos, el Bolide no es barato, a no ser que sea modelo a escala, ni siquiera las llantas que obviamente son de las mejores, es decir Michelin, cuestan $8,000 dólares el set.

¿Y el auto? Entre $4 y $5 millones de dólares. Y aunque quieran y puedan comprarse uno, buena suerte encontrando uno pues los 40 ya se agotaron. Gracias a Miller Motorcars en Greenwich, Connecticut, por las facilidades otorgadas.
