Dicen que no es bueno conocer a tus héroes porque puedes terminar desilucionado. Sin embargo, cuando por fin ví un Lexus LFA en vivo, eso no sucedió.

Vayamos por partes, Lexus sacó a la venta al que hasta la fecha ha sido su único super auto como modelo 2010, y a lo largo de 2 años solo fabricó 500 unidades.

Sí, los fabricaban a mano allá en la tierra del sol naciente, se rumora que a un paso de 20 unidades por mes. Los materiales utilizados para la carrocería son polímero reforzado con fibra de carbono, aluminio, titanio y magnesio.

En cuestión de diseño, estarán de acuerdo que ha envejecido bien, ya no tiene ese factor WoW, pero se sigue viendo contemporáneo, sobretodo en la parte trasera donde sobresalen las salidas de escape triples que lo caracterizan.

El costado tiene un par de líneas bastante caprichosas que son unas rejillas de ventilación ubicadas para guiar el flujo de aire sobre y alrededor del automóvil, enfriando también los frenos y mejorando la carga aerodinámica.

El frente, creo que pudo ser mejor,es muy simple, muy Japonés, pero pues algo no muy agraciado debería de tener, después de todo nada es perfecto.

Al menos la cabina se ve digna de ser el auto insignia de la casa, aunque siendo honestos tiene exceso de botones y pareciera que la ergonomía es nula, ademas de que los diseños minimalistas no eran la prioridad en aquellos tiempos. Aún así, está enfocada al conductor y por supuesto que los materiales son de primerísima calidad.

Sin embargo, lo más importante del LFA es su motor 4.8L V10 con 552 HP, la transmisión es una manual automatizada con 6 velocidades. Su velocidad máxima es de 202 MPH, es decir, 325 km/hr y su aceleración 0 a 60 MPH se da en 3.6 segundos. Si bien esos son números decentes hoy en día, recordemos que el auto tiene 13 años. Lo más impresionante del LFA es el sonido que emite que no es broma, Toyota contrató a Yamaha para desarrollarlo.

Según fuentes extra oficiales, de los 500 LFAs producidos, 180 llegaron a la Unión Americana y solo se produjeron 20 para todo el mundo en el color amarillo como nuestro invitado, convirtiéndolo automaticamente en una rareza. Cuando era nuevo Lexus pedía $375,000 dólares. Hoy en día, una búsqueda rápida arrojó un par de unidades en venta en casi $850,000 USD. Gracias a Lexus en Manhattan, Nueva York, por las facilidades otorgadas.