Vanquish es un nombre conocido dentro y fuera de Aston Martin. Para los que perdieron el rastro, se despidió en el 2019 y hoy regresa mejor que nunca. Es el hijo pródigo de la casa Inglesa.

Tal como su antecesor se caracteriza por 2 cosas: imponer con su presencia y proporsiones y también por tener demasiada semejanza con sus hermanos menores y confundir a más de uno, incluso a expertos cuando solo se ve de frente.

Claro, por atrás es otra historia, vaya que es distinto a sus hermanos, es casi otro lenguaje de diseño con respecto a los otros Aston Martin. Es una obra de arte.

El Vanquish como deportivo que es, lleva llantas traseras más grandes de 21 pulgadas, las delanteras son de 20, y siendo un GT (Grand Tourer) tiene una silueta muy particular con una cabina relativamente pequeña lo mismo que la parte trasera muy corta pero con un cofre enorme.

Y ¿Cómo no? Si allí debe vivir un enorme motor 5.2L V12 con 823 HP, solo un turbo lo ayuda, aquí nada de hibridización, al menos no todavía. La transmisión es una automática de 8 velocidades. Su aceleración de 0 a 62 MPH se da en 3.3 segundos. Su velocidad máxima es de 214 MPH, es decir, 344 Kms/hr. ¿A alguien le interesa saber el rendimiento? Porque a sus dueños no, pero es 13/21 MPG.

En la cabina se combinan a la perfección los materiales más exclusivos, el emsamble más pulcro y una imagen soberbia. Ambas pantallas, tanto el panel de instrumentos como el sistema de infotenimiento miden 10.2 pulgadas cada una. Por si no lo saben, el Vanquish es un biplaza por lo que el par de suertudos pasajeros son acariciados con vestimentas de piel semianilina y gamuza sintética. El techo puede estar revestido con cashmere.

Por supuesto que Aston Martin no revela el precio inicial del Vanquish porque si se pregunta es porque seguramente se sale del presupuesto de quien lo hace, sin embargo, las malas lenguas afirman que supera los $430,000 dólares en Estados Unidos. Les creo. Se ofrece en nada más 75 colores que por obvias razones no publicaré, al menos Aston Martin nos hace el favor de separarlos por tonos:

• Negros y grises
• Morados y azules
• Verdes
• Rojos
• Bronces y Anaranjados
• Blancos y plateados.

Siendo un GT de super lujo, el Aston Martin Vanquish tiene de rival directo al Ferrari 12Cilindri, aunque por prestaciones pudiera competir contra otros exóticos.

Sin duda el Vanquish regresa revitalizado, renovado, remasterizado, remodelado y sobretodo realmente soberbio. Gracias a Miller Motorcars en Greenwich, Connecticut, por las facilidades otorgadas.