Por si no sabían, la primera generación de la Toyota 4Runner solo tenía 2 puertas y se le podía quitar el techo.

En un claro homenaje, la armadora presentó en SEMA y posteriormente llevó a Los Angeles a nuestra invitada, donde tuvimos la oportunidad de verla de cerca.

Tristemente es un concepto y seguramente nunca verá la luz verde, pero viéndola detenidamente nos daremos cuenta que tiene varios detalles más que interesantes. Vayamos por partes.

Para empezar, el costado, cuando tiene el techo puesto parece una 4Runner, aunque los observadores verán que las manijas para abrir las puertas traseras han desaparecido eso es porque las puertas se han inutilizado, aunque ojo, que las ventanas siguen allí y siguen funcionando. Cuando se le quita el techo se descubre la barra protectora para las plazas traseras.

Otro dato interesante es que el medallón trasero se puede seguir bajando.

Obviamente al ya no haber puertas traseras ahora se necesita mover los asientos delanteros hacia adelante para acceder a las plazas traseras.

La cabina lleva vestiduras a prueba de agua y con tonos muy clásicos del surf. Y por supuesto, no pueden faltar un par de tablas de surf.

Y si bien mecanicamente no hay cambios y la sigue moviendo el motor 2.4L de 4 cilindros con 278 HP junto con la transmisión automática de 8 velocidades, el sistema de escape ha sido modificado para tener un sonido más potente.

También la suspensión ha sido modificada y tiene un juego de brazos de control superiores e inferiores de aluminio cortesía de TRD Pro y una barra de aluminio. La carcasa trasera es heredada de la Toyota Tundra pero modificada para adaptarse a la 4Runner.

Finalmente, la 4Runner TRD Surf lleva llantas todoterreno de 37 pulgadas con rines de 17 dándole un toque de masculinidad y capacidad.

A fin de cuentas, la 4Runner TRD Surf nos muestra lo que Toyota es capaz de hacer, lástima que por las regulaciones de hoy en día se tenga que quedar como un concepto, como un homenaje a los inicios de la SUV.