El segundo vehículo de Drako es aún más radical. Aunque les adelanto, es más barato.

Se trata de un SUV con un par de puertas que se abren al estilo «alas de gaviota».

Su diseño deportivo no oculta sus intenciones. Es ancho y la línea inclinada del techo le ayudan a tener esa postura que nos muestra que está listo para arrancones. En medidas y proporciones la veo parecida a la Lamborghini Urus.

Los paneles de la carrocería están fabricados con compuestos de fibras naturales sostenibles. El chasis es de fibra de carbono.

Al frente, la parrilla trapezoidal lleva rejillas de ventilación y un alerón delantero que proporciona carga aerodinámica.

Gracias al estilo de puertas, se puede remover el pilar «B» y asi se facilita el ingreso/egreso al vehículo. La cabina se distingue por su pantalla central de 17 pulgadas. Otra más pequeña sirve de panel de instrumentos. En lugar de espejos laterales lleva cámaras que muestran las imagenes en un par de pantallas a los extremos del tablero.

Al igual que el GTE, la Dragon utiliza 4 motores eléctricos, cada uno en una rueda. La potencia total combinada, según Drako es de 2,000 HP. Drako Motors presume una aceleración de 0 a 60 MPH en tan sólo 1.9 segundos.

La suspensión adaptativa puede subir o bajar el vehículo hasta 6 pulgadas. El sistema de control de tracción permite vueltas tipo tanque.

Drako planea construir hasta 5,000 unidades por año a un costo de $290,000 dólares cada una. Las reservaciones están abiertas: $500 por la normal o $5,000 USD por la primera edicion que serán las primeras 99 unidades que salgan de producción. Las entregas se supone deberán de empezar en el 2026. Ya veremos si es verdad.